Los galardonados con los premios Ciudad de Badajoz responden con dudas cuando los llaman por teléfono en directo para comunicarles la buena nueva. Sólo el de Escultura se queda en Badajoz Realmente no se lo creían. Porque es difícilmente creíble que alguien llame por teléfono pasadas las diez de la noche de un viernes para comunicar a un artista, la mayoría de reconocida trayectoria, que la obra que presentó a un concurso de prestigio ha resultado ganadora y que todo lo que pueda decir será escuchado en directo por más de 200 personas, entre ellas numerosas autoridades. Una edición más, en la gala de los premios Ciudad de Badajoz, celebrada la noche del viernes en el hotel Río, los galardonados se mostraron incrédulos y pusieron en duda las palabras del presentador, Emilio el Mago, pues los premiados no esperaban la llamada. A algunos los cogió en "alpargatas", como al escultor que obtuvo el primer premio, Melchor Balsera Maldonado, el único de Badajoz, ganador por su obra Reflejo . A otros, en plena calle, como le sucedió a Rocío Hernández Triano, de Sevilla, ganadora del premio de Poesía por su obra Pisar cieno . La escritora manifestó que había llegado a asustarse cuando vio el número de teléfono en su móvil porque tiene familiares en Badajoz que no están bien de salud y se temió una mala noticia. El ganador del premio de Fotografía, Pascual Martínez, ni siquiera cogió el teléfono inicialmente, aunque posteriormente devolvió la llamada y el presentador pudo hablar con él al final de la gala. Y al joven periodista Francisco Carrión lo pillaron lejos, en El Cairo (Egipto), donde recibió la buena nueva de que su reportaje sobre un monasterio cristiano en la frontera del Estado Islámico había resultado elegido entre 20 artículos. La entrega de este premio protagonizó el momento más emotivo de la noche cuando el portavoz del jurado, Juan Manuel de Prada, inició su intervención recordando al ganador de la edición anterior, José Miguel Santiago Castelo, "el mejor embajador de Extremadura", fallecido en mayo pasado. Salvo el titular del primer premio de Escultura, el resto de las obras galardonadas proceden de fuera de la comunidad autónoma. El autor de la novela ganadora, Fernando Villamía, por El cuento de la vida , es natural de Vitoria aunque vive en Alicante. Rocío Hernández es de Sevilla, la ciudad donde estudió el periodista galardonado, natural de Granada. Los tres pintores premiados fueron Pepe Bolaño (Huelva), por Rescatando el alma , Pedro Peña Gil (Marbella) por Theatre y Cristina Gamón Lázaro (Madrid), por Infinito 43 . En la modalidad de Escultura también se entregaron dos menciones a Gonzalo García Fernández y Carlos de Pablo. El autor de la fotografía ganadora, Pascual Martínez, es de Murcia. Hasta dentro de un tiempo no viajarán a Badajoz. Cuando el ayuntamiento los cite en el salón de plenos para entregarles sus premios.
Fuente: HOY
