Joseba Rios Garaizar, arqueólogo del Centro Nacional de investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) acaba de publicar en la revista Oxford Journal of Archaeology una artículo sobre una excepcional obra de arte paleolítica con representaciones femeninas grabadas, asociada a las ocupaciones magdalenienses (hace 17.500 años) de la cueva de Arlanpe (Lemoa, Vizcaya). Se trata de un gran bloque de caliza, localizado en 2011, de unos 70 kilogramos de peso que presenta en dos de sus caras grabados de figuras femeninas esquemáticas, una de ellas completa, a la que los arqueólogos han llamado la “Dama de Arlanpe”, que incluye torso, piernas, brazos y cabeza, mientras que las otras dos figuras apenas están esbozadas. Hasta el momento en la Península Ibérica no se había encontrado ninguna imagen de este tipo, y constituye un ejemplo único, al ser la primera que se ajusta claramente al canon de las representaciones femeninas esquematizadas, típicas del periodo Magdaleniense de Centro Europa y Francia, conocidas como tipo Gönnersdorf-Lalinde. Las representaciones de Arlanpe se encuentran entre las más antiguas del tipo Gönnersdorf-Lalinde, y tienen más de un milenio de antigüedad respecto a las famosas representaciones del yacimiento de Gönnersdorf en Alemania, lo que refuerza la idea de que este clase de símbolos se originó en la región franco-cantábrica y acompañó a las poblaciones que se extendieron por el Norte de Europa hacia el final de la última glaciación. Además, el descubrimiento de Arlanpe permite ampliar el área de distribución de estas figuras hasta el Norte de la Península Ibérica, apoyando la idea de unidad cultural de la región franco-cantábrica durante el Magdaleniense. En esta Investigación dirigida por el CENIEH, que ha contado con financiación de la Diputación Foral de Bizkaia, del Gobierno Vasco y de la Fundación Barandiarán, han participado también investigadores del Arkeologi Museoa de Bilbao, de la Universidad de Toulouse y de Ikerbasque. Más información en la web Dicyt Fuente: La Razón