Fondo Logo

Doce monumentos pacenses están en peligro

Castillos derruidos, ermitas en ruina, conventos y monasterios en avanzado estado de deterioro, restos romanos olvidados a su suerte y devorados por la vegetación o torres que se mantienen en pie a duras penas. El legado cultural e histórico de la provincia de Badajoz tiene su cara y su cruz. Desgraciadamente es este último aspecto el que la sitúa en un puesto destacado dentro de la Lista Roja de Patrimonio, elaborada por la asociación Hispania Nostra. Se trata de una organización de carácter no lucrativo declarada de utilidad pública. Nació en 1976 con la finalidad de luchar para preservar, salvaguardar y poner en valor el patrimonio cultural español. «Es la única asociación en España que defiende el patrimonio en toda la integridad geográfica y semántica del término», indica Carlos Morenés, vicepresidente ejecutivo de Hispania Nostra. La presidenta de Honor de esta entidad es la Reina Doña Sofía, que apoya su actividad. Además de organizar conferencias, ciclos temáticos y jornadas, editar publicaciones o entregar premios a las buenas prácticas en materia de conservación y restauración, también elabora una lista con los monumentos del país «sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores». Este registro se actualiza periódicamente. En este ranking, en el que se encuentran todas las provincias españolas, Badajoz ocupa el puesto número 15. Doce monumentos ubicados en la provincia pacense están en esa lista roja. Son dos menos que hace un año, cuando había 14 enclaves en este catálogo. El Fuerte de San Cristóbal, situado en la capital pacense, y la iglesia de San Martín, de Medellín, han logrado salir de este listado gracias a las obras de consolidación y rehabilitación que se han llevado a cabo en ambos espacios. En el primer lugar está Zaragoza con 31 monumentos en riesgo de desaparecer, seguida por Palencia con 28, Soria y Huesca con 25, León con 23, Asturias, Burgos, Navarra y Guadalajara con 21, Jaén con 19, Valencia con 16 y Segovia, Cantabria y Cáceres con 15. En el otro extremo, el de las provincias que mantienen y conservan mejor su patrimonio cultural, se encuentran Gerona y Las Palmas con 0 enclaves en la lista roja. Huelva, Albacete, Melilla y las Islas Baleares sólo tienen 1. De toda la provincia pacense, la localidad con más espacios amenazados es Badajoz. Según el mapa elaborado por esta asociación, la capital pacense es la que muestra más desidia a la hora de cuidar su legado histórico y monumental. La lista de Hispania Nostra recoge que existen cuatro enclaves -hasta que el Fuerte de San Cristóbal fue retirado eran cinco- que sufren graves desperfectos y se encuentran en situación de abandono. Uno de ellos es el convento de las Trinitarias, localizado entre las calles San Lorenzo y Concepción Arenal. La iglesia es de una sola nave y está cubierta con bóvedas de crucería, características de los edificios religiosos del Badajoz del siglo XVI. Aunque este edificio se encuentra inventariado como 'Arquitectura singular con carácter monumental' en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Badajoz corre peligro de hundimiento. Se ha visto sometida a numerosas agresiones vandálicas y ha sufrido el expolio de todos sus elementos ornamentales. La Torre del Palacio Episcopal (siglo XV-XVI), denominada también de la Obispal, es otra víctima de la falta de atención y cuidado. Ubicada dentro del recinto de la Alcazaba de Badajoz, es el único resto que se conserva del primitivo palacio episcopal de la ciudad. Esta torre de mampostería registra desconchones. Según apunta Hispania Nostra, su deterioro es progresivo. El convento de las Madres Adoratrices, en la plaza de San José, también aparece en la lista roja. El actual inmueble se levantó en 1917 rodeando la capilla de la antigua ermita de San José. Entre 2007 y 2009 la Consejería de Cultura restauró la fachada principal de esta construcción, «pero los desperfectos que sufren algunos de sus elementos ornamentales hacen que precise una urgente intervención», dice la entidad cultural. La villa romana de La Cocosa, que se encuentra a unos 16 kilómetros de Badajoz por la carretera de Valverde de Leganés, forma parte también de este listado. Data del siglo I. El yacimiento se descubrió en los años 40 por casualidad, posteriormente fue excavado y actualmente se encuentra a la intemperie. Contiene una villa romana completa, con mosaicos y gran cantidad de utensilios, dependencias relativas a la explotación agrícola. Los restos arqueológicos están descuidados y sin conservación. Están cubiertos de hierbajos. «Está en proceso de destrucción por el clima y el expolio de piezas únicas, como monedas, fragmentos de vasijas o mosaicos», sostiene Hispania Nostra. Villas romanas y castillos El resto de puntos rojos que tiene identificados Hispania Nostra como elementos y bienes en riesgo de desaparición o destrucción están dispersados por la provincia. En el catálogo se incluye la villa romana de Pesquero, en Pueblonuevo del Guadiana. Las excavaciones llevadas a cabo a principios de los 80 sacaron a la luz restos arqueológicos de importancia. El yacimiento está completamente desprotegido. La maleza vegetal cubre sus estancias y ha sufrido desprendimiento. El Castillo de Azagala, de Villar del Rey también integra este registro de enclaves abandonados y en mal estado de conservación. Esta obra militar del siglo XIII, construida en mampostería, sillarejo y sillares, perteneció a la Orden Militar de Alcántara. Hoy está en ruinas. Tiene varias cubiertas hundidas, muros abatidos, almenas y torreones desmochados y bóvedas interiores en peligro de derrumbamiento. También ha sufrido expolio. Otro castillo, el de Mayorga de San Vicente de Alcántara, vive una situación muy parecida. Aunque se desconoce el origen, posiblemente musulmán, perteneció a la Orden de Alcántara desde que la zona fuera reconquistada en el siglo XIII. Actualmente se encuentra prácticamente destrozado, conservándose algunos lienzos de sus murallas y puerta de acceso, una torre defensiva al sur y restos de la torre del Homenaje. El monasterio de San Isidro de Loriana, de La Roca de Sierra, se levantó en 1552. «Como consecuencia de los daños sufridos durante la Guerra de la Independencia y de las desamortizaciones posteriores, fue abandonado definitivamente por los frailes en 1841». Está descuidado. La maleza se extiende por el monumento, que registra hundimientos. La solida fábrica del Torreón de Cárdenas, en Puebla del Maestre, mantiene en razonable estado el exterior. Sin embargo, el interior de esta construcción del siglo XV está en avanzada y progresiva ruina. Otros monumentos en decadencia y visiblemente deteriorados son la ermita de la Encarnación, de Arroyo de San Serván; la ermita de Nuestra Señora de la Esperanza, de Alconchel; o la ermita de Santiago, de Alburquerque. Todos estos espacios sufren grandes destrozos y tienen gran riesgo de desprendimientos y derrumbes. Se trata de pequeñas joyas patrimoniales que han sido olvidadas por las administraciones y la sociedad. Enclaves que fueron testimonios del pasado de Badajoz y que quieren formar parte de su presente y futuro. Piezas históricas, culturales y arquitectónicas que pertenecen a la riqueza monumental pacense y que están pidiendo a gritos ser rescatadas de la indiferencia y el desamparo.

 

Fuente: HOY Badajoz

Últimas Noticias


Con el patrocinio de la
JUNTA DE EXTREMADURA
Consejería de Cultura, Turismo y Deporte


 

Agenda

More in Agenda  

Últimas Publicaciones

  • Inventario de Publicaciones
    MEMORIAS (Trabajos de investigación de historia y arte de Extremadura)   Memorias de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes I. -- Trujillo: Real Academia de...
More in Publicaciones  

Boletines

More in Boletín