Ayer, un día después del acto en la Económica que conmemoró el décimo aniversario de Bernardo Víctor Carande, sus tres hijos y algunos de sus amigos, todavía con el homenaje en la retina, habían quedado para almorzar y recordar al escritor. "Yo, en mi discurso, saqué una carta que él me había mandado. En el reverso se encontraban impresas las palabras Muebles Españoles de Sonseca. La gente se empezó a reír", contó ya a este diario Soledad López, coordinadora y conducta del acto. "Las palabras de sus hijos emocionaron al auditorio, al que acudieron unas 60 personas", manifestó. Y es que, aparte de la reconocida faceta de escritor, Carande destacó en otras muchas ramas artísticas. "Era polifacético y bohemio", cuenta Soledad. En la Económica, a través del testimonio de sus hijos, quedó patente esta condición. Por ejemplo, su dimensión de dibujante. "Salía al campo sólo con un lápiz y un cuaderno y era capaz de mostrar una expresividad extraordinaria. Sólo con mirar algo conseguía un encuadre perfecto", recordó Victoria Carande. "Yo salía a pintar con él. Reflejó muy bien el contraste entre naturaleza e industria o la deshumanización de la vida moderna". Todos los participantes en el coloquio de la Económica alabaron, en su turno de palabra, las cualidades del pacense. Francisco Pedraja; Teresiano Rodríguez; Roció y Victoria Carande y Vicente García. La escritora y fotógrafa Matilde Muro ahondó, además, en su aportación al mundo de la fotografía taurina. "No realizó retratos de los grandes pases o de las 'portas gayolas'. El se fijó en los detalles; el humo de los puros en los tendidos, las caras de miedo en los burladeros o los sentimientos de emoción y tristeza", manifestaba ayer. "Se codeó con lo mejor del mundo de la fotografía taurina, aunque a los tres años dejó El Ruedo, la revista donde publicaba, por la incompatibilidad con los horarios". El único ausente en el acto de ayer fue Jesús García Calderón, que se encontraba en su toma de posesión como director de la Academia de Bellas Artes de Granada. No se olvidó de él la Económica, que le felicitó, desde la distancia, al dejar vacía la silla que iba a ocupar.
Fuente: El Periódico Extremadura