Fondo Logo

Dos extremeños, el fiscal jefe de la Audiencia de Badajoz, Juan Calixto Galán, y el médico Mariano Casado, han ganado la III edición del Premio Nacional de Derecho Sanitario con el trabajo 'Las Instrucciones previas. Una reflexión crítica'. Galán y Casado afrontan en esta obra las voluntades anticipadas o las instrucciones previas, donde queda reflejada la autodeterminación personal en su máxima expresión. En ella se refleja el respeto a la dignidad como un valor inherente al ser humano, aparte de un derecho considerado como inviolable e intangible de la persona, según informa el Colegio de Médicos de Badajoz Casado es especialista en Medicina Legal y Forense. Desempeña la Jefatura del Servicio de Laboratorio Forense. Galán es un jurista de dilatada trayectoria profesional en el Ministerio Fiscal. Los autores del trabajo reflexionan, tanto desde la perspectiva médico legal como jurídica y deontológica, acerca de las decisiones que es preciso tomar al final de la vida, y más concretamente cuando éstas se realizan con antelación. El trabajo premiado analiza extensamente este tema, e incluso llegan a proponer medidas o soluciones para poder fomentar el conocimiento de este documento a nivel de todo Estado y así poder mejorar la implantación y cumplimentación del mismo. El galardón se entregará el próximo 30 de marzo en la Real Academia Nacional de Medicina. Fuente: HOY

El ensayo literario "Dios es azul/Poesía y religión en la Generación del 27", de la autora extremeña Nuria Rodríguez Lázaro, fue presentado ayer en la librería Alberti, en Madrid. En el acto también participaron los poetas y profesores de Universidad Luis García Montero y Rafael Morales. Rafael Morales, profesor de Filología Hispánica en la Universidad Autónoma, introdujo a la autora, natural de Garrovillas de Alconétar, actualmente directora del Departamento de Literatura Española en la Universidad de Burdeos, y destacó la novedad e importancia del ensayo sobre la huella religiosa en tres de los poetas más característicos de la Generación del 27. Por su parte, Luis García Montero, premio Nacional de Poesía, ensayista y profesor de Literatura en la Universidad de Granada, hizo una larga presentación de la obra de la profesora extremeña y planteó en profundidad las relaciones entre religión y poesía en la historia literaria española. Por otra parte analizó las repercusiones que las actitudes políticas de los poetas que vivieron la Guerra Civil tuvieron en su obra: Juan Ramón Jimenez, Antonio Machado, García Lorca, Rafael Alberti, Vicente Aleixandre, Luis Cernuda, Dámaso Alonso, Leopoldo Panero, etc. La autora, Nuria Rodriguez Lázaro, se refirió al hecho de la apropiación que el Régimen de Franco hizo de la religión católica y de las vinculaciones que desde la contienda civil tuvieron la jerarquía eclesiástica y la Dictadura. Justificó luego la elección de cada uno de los autores estudiados –Luis Cernuda, Dámaso Alonso y Pedro Salinas-, como representativos de las actitudes que la mayoría de los poetas de la Generación del 27. Amplió sus reflexiones a otros poetas de la misma Generación para destacar la evolución que se ha registrado en la pervivencia literaria de las huellas y referencias religiosas hasta el momento presente, en el que prácticamente han desaparecido. La intervención de la profesora extremeña sirvió para animar el coloquio que siguió a la presentación sobre las dificultades que las generaciones de jóvenes tienen en la actualidad para el entendimiento de la poesía clásica española impregnada de las vivencias y referencias a la historia religiosa. Nuria Rodríguez Lázaro agradeció a la Editora Regional de Extremadura y a la Universidad de Burdeos que han coeditado "Dios es azul/ Poesía y Religión en la Generación del 27" y finalmente pasó a firmar ejemplares en la una de las librerías de más prestigio literario e intelectual de la capital de España. Al acto asistieron un grupo de profesores, poetas, y una representación de autores extremeños y amigos de la autora, nacida en Garrovillas de Alconétar.

Fuente: HOY

Los Premios Extremadura Exporta 20016 reconocieron ayer el talento exportador de cinco empresas extremeñas en el transcurso de una gala que se desarrolló en el edificio Siglo XXI en Badajoz. La Junta de Extremadura a través de Extremadura Avante convoca y organiza estos galardones --que llegan a su tercera edición-- con el patrocinio de Ibercaja Banco, que refrenda así su apoyo al tejido empresarial regional. El premio Extremadura Exporta Agroalimentario recayó en Tomates del Guadiana. El reconocimiento Extremadura Exporta Joven fue para la Compañía de Cervezas de Extremadura. El galardón a la Innovación lo recogió la empresa Vianóleo, mientras que el premio Extremadura Exporta Conocimiento --nueva categoría este año-- ha recaído en Arram Consultores. El reconocimiento a la Trayectoria fue a parar a Conservas Vegetales de Extremadura. El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, abogó en su intervención tras la entrega de galardones por el trabajo conjunto para lograr una mayor internacionalización de las empresas de la comunidad. El jefe del Ejecutivo autonómico destacó el trabajo de los galardonados y ha subrayado su ejemplaridad, al tiempo que ha manifestado que "si con palabras se vence, para convencer son necesarios los ejemplos", por lo que ha valorado las prácticas correctas y el esfuerzo de los ciudadanos. El acto contó también con la presencia de la presidenta de la Asamblea de Extremadura, Blanca Martín; del consejero de Economía e Infraestructuras del Ejecutivo autonómico, José Luis Navarro; del director general de Avante, Miguel Bernal; y la directora general de Acción Exterior, Rosa Balas, entre otras autoridades.

Fuente: El Periódico Extremadura.

El coronel no tiene quien le escriba, tituló el americano Gabriel García Márquez una de sus obras más entrañables. Los conquistadores tampoco tienen quien los escriba. Su historia resulta políticamente incorrecta, y los países que contribuyeron a fundar no los reconocen como suyos. Pero incluso así, el caso de Francisco de Pizarro, conquistador del Perú, es más doloroso que otros. A diferencia del admirado Hernán Cortés, Pizarro y sus hermanos gozaron de escaso reconocimiento en el periodo que les tocó vivir. El carácter gris del extremeño y las sucesivas guerras civiles entre ellos no ayudaron, precisamente, a que Pizarro encontrase quien le escriba.
Hernán Cortés, el apuesto capitán Cuando Pizarro comenzaba a gestar su leyenda hacía veinte años que Hernán Cortés había conquistado Tenochtitlan. Llovía sobre mojado. Cortés fue considerado el mayor héroe en Castilla por sus coetáneos, incluso por encima del militar más prestigioso del periodo, el Gran Capitán. «Fue en tanta estima el nombre solamente Cortés, así en todas las Indias como en España, como fue nombrado el nombre de Alejandro de Macedonia, y entre los romanos Julio César», escribió Bernal Díaz del Castillo, autor de «Historia verdadera de la conquista de la Nueva España». Cortés no era un hombre culto, pero sabía impresionar a la gente a través del verbo. Siendo uno de los encandilados el Emperador Moctezuma, que, en una mezcla de síndrome de Estocolmo y admiración sincera, mantuvo una extraña amistad con el hombre que pretendía derribar su imperio.
Retrato idealizado de Hernán Cortés
Retrato idealizado de Hernán Cortés Valiéndose de la hostilidad que el Imperio azteca arrastraba entre las tribus vecinas, el extremeño fue capaz de aunar los esfuerzos de distintos jefes locales para abrirse paso por el norte de América, usando aquí la superioridad de las armas europeas para imponerse en el campo militar. No obstante, su gesta estuvo en todo momento acompañado de una cuidada propaganda, buscando así convencer a Carlos V de que la suya era su causa, y no la de su rival y superior, el gobernador de Cuba, que se enfrentó a Cortés durante la conquista de México. Por lo mucho que le importaba su imagen, Cortés insistió en que su biografía la escribiera su capellán, Francisco López de Gómara. Como recuerda Henry Kamen en su libro «Poder y gloria: Los héroes de la España imperial» (Austral), en esta biografía el descubrimiento y conquista de América se presentaban como elogio triunfal de España y obra bendecida por el mismísimo Señor. La imagen del héroe extremeño quedó grabada sobre toda una generación. También en el extranjero fue visto durante mucho tiempo como el estereotipo de héroe europeo. «Es el producto final de siglos de preparación para un esfuerzo colectivo de la voluntad humana», describe el historiador norteamericano W. L. Schurz en «This New World».
Francisco Pizarro, el cruel conquistador Nada que ver con la imagen del gris Pizarro. Nacido en la localidad de Trujillo (Extremadura), Pizarro era un hijo bastardo de un hidalgo emparentado con Hernán Cortés de forma lejana, que combatió en su juventud junto a las tropas españolas de Gonzalo Fernández de Córdoba en Italia. Aunque tradicionalmente se ha considerado que ambos eran primos, en realidad su parentesco era de tío y sobrino, puesto que la línea de Hernán Cortés había corrido una generación más que la de Francisco Pizarro. En 1502, el extremeño se trasladó a América en busca de fortuna y fama, no siendo hasta 1519 cuando participó de forma directa en un suceso relevante de la Conquista. Francisco Pizarro arrestó y llevó a juicio a su antiguo capitán, Vasco Núñez de Balboa, el primer europeo en divisar el océano Pacífico, por orden de Pedro Arias de Ávila, Gobernador de Castilla de Oro. El descubridor fue finalmente decapitado ese mismo año con la ayuda de la versión más oscura de Pizarro, la que alimenta en parte la antipatía histórica que sigue generando este personaje. Francisco Pizarro arrestó y llevó a juicio a su antiguo capitán Vasco Núñez de Balboa, el primer europeo en divisar el océano Pacífico Francisco Pizarro, de 50 años de edad, decidió unir sus fuerzas con las de Diego de Almagro, de orígenes todavía más oscuros que el extremeño, y con las del clérigo Hernando de Luque para internarse en el sur del continente en busca del otro gran imperio americano de su tiempo: los incas. Precedida por la viruela traída por los europeos en 1525, que había diezmado a la mitad de la población inca, la llegada de Francisco Pizarro a Perú fue el empujón final a un imperio que se tambaleaba a causa de las enfermedades, la hambruna y las luchas internas que enfrentaban a dos de sus líderes (Atahualpa y Huáscar) por el poder.
El conquistador, a caballo, en el centro de la expedición pintada por Ferrer-Dalmau
El conquistador, a caballo, en el centro de la expedición pintada por Ferrer-Dalmau La inferioridad numérica de Pizarro no fue ningún obstáculo. ¿Cómo fue posible que tan pocos pudieran vencer a tantos? es la pregunta que ha causado fascinación en la comunidad de historiadores. «En Cajamarca matamos 8.000 hombres en obra de dos horas y media, y tomamos mucho oro y mucha ropa», escribió un miembro vasco de la expedición en una carta destinada a su padre. La superioridad tecnológica y lo intrépido del plan de Pizarro, cuyas intenciones no habían sido previstas por el emperador Atahualpa, al estimar a los españoles como un grupo minúsculo e inofensivo, obraron el milagro militar. El secuestro y muerte de Atahualpa, que no llegó a ser liberado pese a que los incas pagaron un monumental rescate en oro y tesoros por él como había exigido Pizarro, marcó el principio del fin de este imperio. Sin embargo, lejos de la imagen de que el extremeño conquistó el Perú en cuestión de días, hay que recordar que la guerra todavía se prolongó durante toda una generación hasta que los últimos focos incas fueron reducidos.
Pizarro y la guerra de los conquistadores Los conflictos internos entre los conquistadores, que enfrentaron a Pizarro y sus hermanos contra su otrora aliado, Diego de Almagro, enturbiaron todavía más la imagen de los conquistadores del Perú. Tras la derrota y ejecución de Almagro, en un nuevo giro de los acontecimientos, los partidarios del derrotado irrumpieron el 26 de junio de 1541 en el palacio de Pizarro en Lima y «le dieron tantas lanzadas, puñaladas y estocadas que lo acabaron de matar con una de ellas en la garganta, relata un cronista sobre el amargo final del conquistador extremeño. Las guerras civiles entre los conquistadores se prolongaron hasta finales del siglo XVI, convirtiendo a los Pizarro también en villanos a ojos de de la Corona. Frente al encantador de serpientes de Cortés, que acudió a la Corte de Carlos V a contar sus hazañas, Pizarro no parecía hecho de la materia de que están hechos los héroes. Codicioso por naturaleza, cruel y dado a buscar su interés personal, o al menos así le recordó el mundo. Fue con el paso de los años cuando surgió la leyenda del humilde Pizarro: una persona sin privilegios que abandona la pobreza y engrosa las filas de la nobleza tradicional. Un héroe para el pueblo.
Francisco de Pizarro, herido de muerte en su palacio de Lima
Francisco de Pizarro, herido de muerte en su palacio de Lima- Wikimedia A lo largo de los siguientes siglos, Pizarro ganó en reputación. Los historiadores norteamericanos, que veían en los conquistadores a los precursores de sus grandes pioneros, elevaron a la categoría de esforzado héroe al extremeño. La primera biografía fiel de Pizarro la publicó el norteamericano William H. Prescott en su «History of the Conquest of Peru», quien consideraba que España había descuidado a uno de sus más famosos héroes: «Ningún español ha intentado escribir una historia de la conquista del Perú basada en documentos originales». La prueba de este descuido es que en Trujillo, su lugar de nacimiento, nadie hizo el menor intento de erigir una estatua al conquistador hasta la década de 1890. Mientras España empezaba a recuperar a sus héroes levemente, Iberoamérica comenzaba a considerar a los conquistadores como genocidas que habían destruido las fértiles culturas previas a la llegada de los españoles. La Guerra de Cuba de 1898 sumó a EE.UU. a esta tendencia histórica contra los personajes españoles. Aquí, tanto Cortés como Pizarro, compartieron el mismo destino. Ni Perú ni México les aceptaron como los padres fundacionales de sus países.
Sobre tumbas, estatuas y biografías perdidas Tras ser trasladados desde Europa los restos de Cortés a una iglesia de Ciudad de México en el siglo XVII, la independencia del país cambió radicalmente la imagen que tenían sobre él. A diferencia de otros países como Colombia, que sí conservó el culto a Benalcázar o Ecuador con Orellana –en un intento de dar sentido histórico a sus países–, la oposición a Cortés se mantuvo firmemente enraizada hasta el punto de que en la actualidad no hay ninguna estatua de cuerpo entero del conquistador en todo México. Su tumba llegó a correr peligro. Poco después de la independencia, empezaron a correr pasquines que incitaban al pueblo a destruir el sepulcro. Previniendo la inminente profanación, las autoridades eclesiásticas decidieron desmontar el mausoleo y ocultar los huesos. En la noche del 15 de septiembre de 1823, los huesos fueron trasladados de forma clandestina a la tarima del altar del Hospital de Jesús y el busto y escudo que decoraban el mausoleo fueron enviados a la ciudad siciliana de Palermo. La única estatua de Cortés erigida en territorio mexicano permanece junto a su humilde tumba Trece años después los restos cambiaron su ubicación a un nicho todavía más oculto, donde permanecieron en el olvido durante 110 años. El 9 de julio de 1947, tras un estudio de los huesos, Cortés fue enterrado de nuevo en la iglesia Hospital de Jesús con una placa de bronce y el escudo de armas de su linaje. La única estatua de Cortés erigida en territorio mexicano permanece junto a esta humilde tumba, cuya existencia se guarda de forma discreta en un país que, en su mayor parte, sigue sin asumir como positivo el papel que jugó el conquistador en su fundación.
Estatua de Francisco de Pizarro en Lima
Estatua de Francisco de Pizarro en Lima El caso de Pizarro es casi idéntico. Durante un siglo se creyó que se habían exhumado y expuestos en un féretro de cristal los restos del extremeño. Sin embargo, a finales del siglo XX unos hombres descubrieron una caja de plomo en un nicho sellado de la catedral de Lima con la inscripción «aquí yace la cabeza del Señor Marqués don Francisco Pizarro, que descubrió y ganó los reinos del Perú y los puso en la Real Corona de Castilla». Un grupo de forenses confirmó que esos eran los restos auténticos, y no los que se homenajeaban desde 1892. A partir de entonces Perú ha mostrado poco interés en homenajear o reivindicar la figura de Pizarro. A petición de las autoridades peruanas, una estatua del conquistador fue trasladada de Nueva York a Lima en 1934, lo cual se convirtió automáticamente en un foco de controversia. En 2003 las presiones de la mayoría indígena dieron como resultado que esta estatua ecuestre de Pizarro fuera llevada al depósito municipal, a la espera de encontrarle una nueva ubicación. Al año siguiente la colocaron, ya sin pedestal, en un parque rehabilitado del barrio de Rimac. La polémica promete seguir vigente. Además, frente a las buenas biografías dedicadas a Cortés y a la conquista de México, los esfuerzos por escribir una obra amplia sobre la vida de Pizarro sigue siendo una asignatura pendiente tanto de la historiografía de Perú como la de España.

Fuente: ABC

Un gestor de fondos destroza los récords de arte al adquirir un ‘dekooning’ por 300 millones y un ‘pollock’ por 200 millones Kenneth Griffin, una de las figuras más poderosas en el mundo de las finanzas, acaba de convertirse en el protagonista de la compra de arte más cara de la historia. El fundador del fondo de cobertura Citadel pagó en otoño –la compra se hizo pública anoche- 500 millones de dólares (450 millones de euros) por Interchange (1955), un lienzo de Willem de Kooning, y por Number 17A (1948), de Jackson Pollock. El dekooning le supuso un desembolso de 300 millones y el pollock, los 200 restantes. El dekooning, que hasta ahora era propiedad de la fundación David Geffen —de donde también procede el pollock— se habría convertido así en la obra de arte contemporáneo más cara nunca antes vendida, de acuerdo con los detalles revelados por las cadenas financieras CNBC y Bloomberg, y sería por tanto también la pieza de arte más valorada de la historia, igualada con Nafea faa ipoipo (¿Cuándo te casarás?), de Paul Gauguin, adquirida en febrero de 2015 por el mismo precio por Qatar. Los dos trabajos de los maestros expresionistas abstractos han sido cedidos por el magnate al Instituto de Arte de Chicago, la ciudad donde tiene su firma la sede, y allí están expuestos actualmente en la misma sala. En 1989 Interchange (1955) ya batió récords al ser adquirido por el coleccionista japonés Shigeki Kameyama por 20,6 millones de dólares en una subasta en Sotheby’s en Nueva York.
Griffin, a sus 47 años, es el gestor de fondos mejor pagado de Wall Street y su fortuna personal asciende a 7.400 millones de dólares. El pasado mes de septiembre realizó la mayor operación inmobiliaria en la ciudad de Nueva York, al comprar tres plantas en el rascacielos del número 220 de Central Park South. Pagó por la propiedad 200 millones. El fondo de cobertura, que maneja activos por valor de 26.000 millones, tiene entre sus asesores al expresidente de la Reserva Federal Ben Bernanke. Empezó en el mundo de las finanzas cuando estudiaba en la Universidad de Harvard. Seguía sus inversiones desde el dormitorio gracias a que logró que la dirección del centro le dejara instalar una parabólica. La última crisis financiera se llevó por delante más de la mitad de su fortuna, pero el agresivo inversor logró capear el temporal y ahora su fondo es uno de los que tiene mejor rendimiento.
Ken Griffin en 2013.
Ken Griffin en 2013. Patrick T. Fallon Bloomberg La colección personal del magnate incluye una obra del artista alemán Gerhard Richter, por la que pagó 46 millones de dólares en una subasta celebrada hace ahora un año en Sotheby´s. Griffin es fideicomisario del Instituto de Chicago desde 2004 y dedicó parte de su fortuna a la ampliación del centro. El pasado diciembre donó 40 millones al Museo de Arte Moderno de Nueva York, en la que está considerada como una de las mayores contribuciones privadas a la institución. Griffin empezó a construir su propia colección privada hace dos décadas. Recientemente, sin embargo, advirtió de los riesgos que corre el mundo del arte, al decir que “se está convirtiendo en un mercado opaco dominado por especuladores y eso impide entender el valor futuro de la obras”.
Las obras más caras (hasta ahora) Nafea faaa ipoipo. Este gauguin fue vendido en una operación que ascendió a un total de 264 millones de euros. Es la obra de arte más cara en términos absolutos de toda la historia. Adquirido por la Autoridad de los Museos de Qatar. Los jugadores de cartas. La familia real de Qatar adquirió en febrero de 2012 este conocido lienzo de Cézanne por 191 millones de euros. Les femmes d’Alger. Christie’s adjudicó el pasado mayo en Nueva York este picasso de 160,8 millones de euros. Nu Couché. Uno de los últimos trabajos de la corta carrera de Modigliani fue subastada en Christie’s en noviembre de 2015 y llegó a los 158 millones de euros. El financiero hizo esta reflexión pocos días después de que Nu Couché, una pintura del artista italiano Amedeo Modigliani fuera subastada por 170,4 millones de dólares en Christie’s en noviembre del año pasado. El comprador fue Liu Yiqian, un multimillonario chino que empezó como taxista y vendedor ambulante para acabar especulando en el mercado bursátil y acumular una fortuna de casi 1.500 millones de dólares, según Bloomberg. Aquella adquisición se realizó vía telefónica en una puja que duró nueve minutos, y Liu Yiqian pagó la compra con su tarjeta American Express. “Lo hice así para acumular puntos y que la familia siga volando gratis”, respondió el millonario chino a The New York Times. La compra que ahora protagoniza el magnate, que se negoció el pasado otoño por la vía privada, supera el récord de 300 millones de dólares que la Autoridad de los museos de Qatar pagó en febrero de 2015 por Nafea faa ipoipo (¿Cuándo te casarás?), de Paul Gauguin, considerada la compra de arte más cara de la historia y que estuvo expuesto en el Reina Sofía posteriormente, desde finales de junio a mitad de septiembre. Los Museos de Qatar ya había adquirido anteriormente Los jugadores de cartas, de Cézanne, por 250 millones de dólares.

Fuente: El País

Recorre la frontera hispano lusa de norte a sur, con más de 300 fotografías El libro del historiador Moisés Cayetano Tesoros de la Raya Hispano Lusa acaba de ver la luz, publicado por la Fundación Caja Badajoz. Fue presentado ayer en el recientemente inaugurado Forte da Graça de Elvas tras su rehabilitación y el acto, al que asistieron más de 200 personas, contó con la presencia del presidente de la fundación, Emilio Vázquez, así como el presidente de la cámara municipal elvense, Nuno Mocinha, y el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso. Tesoros de la Raya Hispano Lusa contiene 65 capítulos con un apoyo fotográfico muy amplio, en los que el autor pasea por toda la frontera, desde el norte, Galicia y el Miño portugués, contornea y baja por Castilla León, el Alentejo y Extremadura y Andalucía, con algunas escapadas al exterior, a Lisboa, Setúbal, las playas del Alentejo y el Algarve y el interior español, fundamentalmente extremeño. "Es un recorrido de viajero", que abarca sobre todo el patrimonio artístico monumental, destacando las fortificaciones de la edad moderna, aunque también pinturas rupestres, restos megalíticos a construcciones actuales, mucha geografía, geología, paisajes, gastronomía y fiestas. El libro tiene origen en uno anterior: Un paseo por la Raya , que le publicó el Gabinete de Iniciativas Transfronterizas, que constaba de 30 capítulos y que ahora ha ampliado. La aportación fotográfica es casi toda reciente. La Fundación Caja Badajoz prevé presentar el libro en marzo en Badajoz y, en abril, en Olivenza. De plantearse una segunda edición, Moisés Cayetano ya está pensando en corregirla y aumentarla con una docena de nuevas entradas.

Fuente: El Periódico Extremadura.

Últimas Noticias


Con el patrocinio de la
JUNTA DE EXTREMADURA
Consejería de Cultura, Turismo y Deporte


 

Agenda

More in Agenda  

Últimas Publicaciones

  • Inventario de Publicaciones
    MEMORIAS (Trabajos de investigación de historia y arte de Extremadura)   Memorias de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes I. -- Trujillo: Real Academia de...
More in Publicaciones  

Boletines

More in Boletín